Pintor de formación autodidacta, dedicado al realismo artístico en sus variadas presentaciones técnicas y gráficas. Sus áreas de estudio y desarrollo comprenden, desde el comienzo, el entendimiento de la forma como parte fundamental de la poesía objetiva de la realidad.

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Su inquietud por las variadas texturas de la naturaleza, lo llevaron desde sus inicios a pintar y dibujar desde el natural todo lo que contuviera vida o que evidenciara una nostálgica relación con nuestro pasado y presente. Desde un humilde utensilio de campo, hasta el majestuoso florecer de un rosal, este pintor entrega dignidad por igual a cada ítem que pueda representar.

El retrato y la figura humana, posterior área de estudio, llevan a Iturrieta a interactuar con la antigua habilidad de registro de nuestras épocas ajenas a la inmediatez de la fotografía.

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La práctica del retrato en vivo y el estudio de metodologías académicas antiguas y contemporáneas, le entregan certitud al trazo con la que define los rasgos y gestualidad de las personas que son retratadas por él.

Actualmente Iturrieta se dedica a la pintura y el dibujo para el disfrute personal, produce para colecciones privadas y dedica el resto de su tiempo a instrucción técnica para jóvenes aspirantes de la disciplina, entregando lo necesario para el desarrollo y filosofía de quienes reconocen en él una fuente conocimiento relevante en el noble oficio de la pintura artística.